Aquí tenéis la segunda parte de lo que fue el METAL BATS FEST de este año.
SHERATÁN
Los cuatro titanes de Montijo tomaban el escenario con su exquisito heavy metal de corte clásico. Qué mejor manera de comenzar que con el trallazo de “Dulce venganza”, de su último trabajo La maldición. Desde el primer momento pudimos disfrutar del grandísimo trabajo de David Romero y Sergio Rodas a las guitarras, compenetrados al máximo tras largos años de andadura conjunta.
La dura el “El beso del mal” mantenía el nivel y daba paso a una de las joyas de SHERATÁN, “La maldición”. El intenso tema, que narra la historia del sádico noble francés Gille de Rais, llegaba con el grupo totalmente volcado y con Sergio Rodas dejando claro que era el cantante de más alto nivel que iba a pisar las tablas de la sala Durango esa noche.
“Nunca (Agosto 1945) y “Sueño inmortal” sonaron aplastantes con la base rítmica compuesta por Sergio Sánchez al bajo y José Salas a la batería funcionando a mil por hora.
De nuevo las guitarras se convertían en protagonistas absolutas en “Siervos de la tempestad”, con David Romero erigiéndose en dueño y señor del escenario. Llegaba el momento de disfrutar de “Abrazo final”, tema nuevo que formará parte de su próximo disco. Las sensaciones no pudieron ser mejores en un tema clásico de los extremeños, cargado de dureza y melodía a partes iguales.
Sin un segundo de descanso sonaban “Destrucción”, con esas dobles guitarras que ponen los pelos de punta, y la impresionante “Olvidado”, con Sergio Sánchez sacando humo de las cuerdas de su bajo y José Salas pulverizando los parches de su kit. “A mi voluntad” nos acercaba a la recta final, para la que se guardaban dos temas que son ya verdaderos clásicos de la banda. “En nombre de Dios” nos dejaba a Sergio Rodas haciendo parecer fácil lo difícil, llegando con su voz a tonos imposibles para el resto de los mortales. Fin de fiesta con la imprescindible “Condenado”, que nos dejó a todos extasiados.
En resumen, verdadera lección de heavy metal ofrecida por un grupo en el que cada uno cumple con su misión de forma excepcional. Sergio Rodas y David Romero con sus guitarras dotan a la banda de una brillantez inusual. Por otro lado, Sergio Sánchez aporta con su bajo un punto extra de dureza y agresividad escénica, acompañado por esa máquina de precisión que es José Salas a la batería. La guinda del pastel la pone Rodas con su privilegiada voz.
Como ya hemos dicho antes, SHERATÁN cedió su puesto en el cartel a los canadienses STRIKER para así facilitar la transición entre grupos, al compartir estos últimos el kit de batería con CAULDRON. Excepcional detalle de una banda grande tanto dentro como fuera del escenario.
Set-list:
1. Dulce venganza
2. El beso del mal
3. La maldición
4. Nunca (Agosto 1945)
5. Sueño inmortal
6. Siervos en la tempestad
7. Abrazo final
8. Destrucción
9. Olvidado
10. A mi voluntad
11. En nombre de Dios
12. Condenado
STRIKER
Los canadienses salieron a escena como penúltimo grupo y ofrecieron algo menos de una hora de concierto. Esto fue debido a que el bajista Dave Arnold se vio obligado a no viajar por problemas personales. Para no cancelar la gira, tanto Jason Decay como Ian Chains de Cauldron se ofrecieron a aprenderse cinco canciones cada uno, hecho que provocó el recorte del set de STRIKER.
Por otro lado, estaban los problemas de garganta que tenía el activo y jovencísimo Dan Leary, por los que él mismo pidió reiteradas disculpas. Aunque no eran excesivamente acusados sí que le impidieron realizar un concierto como a él le hubiera gustado.
Algo que llama la atención de STRIKER es la juventud de sus miembros, casi todos con caras de niño, sobre todo la del guitarra solista Ian Sandercock, que por cierto hace una labor tremenda a las seis cuerdas.
De nuevo el sonido del que iba a disfrutar STRIKER fue muy, muy bueno. La asistencia fue elevada, con la sala ya casi llena, y compuesta principalmente por seguidores muy jóvenes y entregados, lo que hizo que STRIKER se sintieran muy a gusto y dieran todo sobre el escenario. Tengo que añadir que a pesar de su juventud, el grupo me pareció muy conjuntado y con muy buen rollo entre ellos.
El concierto iba a girar en torno a su primer CD, Eyes In The Night y a su EP debut, Road Warrior, aunque no perdieron la oportunidad de ofrecernos en directo alguna de sus nuevas canciones que irán incluidas en su inminente nuevo álbum. De hecho empezaron su actuación con una de las nuevas, “Forever”, que tuvo muy buena acogida y tras la cual pasaron a unas cuantas del Eyes In Th Night, como “The White Knight”, “Eyes In TheNight”, “Terrorizer” y “Never Ending Nights”. El público se volvió literalmente loco, arrojándose incluso alguno desde el escenario, acción que posteriormente imitó Dan Leary, el muy envidioso. Siguieron con otra nueva de la mano de “Can´t Stop the Rush”, “Fire” del primer EP y continuaron con el, como ellos mismos dijeron, clásico del Heavy Metal, “Princess of theNight”. Buena y rápida versión de los británicos SAXON, tras la cual el cantante vuelve a pedir perdón “por la mierda de voz” y se mete de lleno en la tremenda y contundente “Full Speed Or No Speed”. Terminaron su excelente concierto con otra del primer EP, The Keg That Crushed New York”.
En resumen, corto pero excelente concierto de los jóvenes canadienses que dejaron a sus fans muy contentos, pero seguramente deseosos de más. Eso sí, no les vi quejarse para nada.
Set-list:
1. Forever
2. The White Knight
3. Eyes In The Night
4. Terrorizer
5. Never Ending Nights
6. Can’t Stop The Rush
7. Fire
8. Princess Of The Night (Saxon Cover)
9. Full Speed Or No Speed
10. The Keg That CrushedNew York
CAULDRON
Sin duda alguna, el mejor sonido de la noche lo pusieron CAULDRON. El trío canadiense se encargó de cerrar esta gloriosa edición del METAL BATS.
En esta ocasión fue STRIKER quien echo una mano a CAULDRON, contando con Adam Brown a la batería, para cubrir un puesto que está vacante desde el verano.
Empezaron con” Frozen in Fire”, tercer corte de su buenísimo Burning Fortune, y a partir de ese momento me di cuenta de lo que se nos venía encima: un aluvión de heavy metal al más puro estilo ochenteno.
CAULDRON en todo momento cautivó a los presentes con esa mezcla de heavy ochentero americano con tintes de la NWOBHM. Su actuación se basó en diez bombazos sacados de sus dos trabajos, el ya mencionado Burning Fortune y su primer trabajo Chained To The Nite.
El trío se comportó de una forma magistral y contundente musicalmente en cada uno de los temas, en los que su guitarrista Ian Chains brilló con luz propia. Jason Decay lo bordó haciendo que el sonido de estos fuera prácticamente idéntico al de sus vinilos y para colmo se entendió a las mil maravillas con Adam, que no parecía tarea fácil.
Como colofón final los canadienses no querían terminar su recital sin antes invitar al escenario a prácticamente toda la organización de este METAL BATS, haciendo a estos partícipes de los coros de su ya afamado “All Or Nothing”, con la que acabaron este grandísimo festival.
Set-list :
1. Frozen in fire
2. Bound to the stake
3. Conjure the mass
4. Miss you to death
5. Rapid city
6. Fermenting enchantress
7. End of time
8. Into the cauldron
9. All or nothing
Desde esta web, no queremos terminar esta crónica sin antes felicitar a todos los que hicieron posible esta nueva edición de METAL BATS, ya que estuvieron a la altura en todos los aspectos, logrando que la gala fuera inmejorable.
Igualmente les agradecemos su colaboración en todo momento (antes y después del concierto) para facilitarnos el trabajo a la hora de confeccionar esta crónica. Muchas gracias, sois unos fenomenos.
David Bender, Alberto Yayo y Marciaaaaal.
Fotos: Marciaaaaal.