Ante todo, desearos a todos un año lleno de salud, independencia y excelentes conciertos. Me incorporo al 2011, con esta humilde crónica de un disco del 2010 que, para mí ha sido una de las mayores sorpresas del año pasado. ¡¡ Y qué grandísima sorpresa!!. Hacía mucho tiempo que no me quedaba enganchado desde la primera escucha (creo que el último orgasmo musical para mi fue descubrir a los tremendos “Circus Maximus”) y tengo que deciros que no esperaba nada de este, para mi hasta ahora desconocido quinteto de Estocolmo que responde al enrevesado nombre de “Seventh Wonder”.
Lo que me llevó a escucharlos no fue nada más ni nada menos que las magníficas críticas que había leído acerca de esta su última entrega discográfica en diferentes medios web. Todo ello desató mi curiosidad, pero sinceramente, lo que esperaba era otra banda de metal progresivo a lo Dream Theater de esas tantas que hay por el mundo (lo cual tampoco me parecía mal; ni mucho menos). Pero Ahhhhh!!, qué injusto he sido prejuzgando y qué pedazo de sorpresa me he llevado con este quinteto sueco.
El fan de Dream Theater no encontrará aquí otro clón más de la fabulosa banda americana, sino que encontrará un grupo impresionante de metal progresivo melódico (esta es la principal característica de este grupo: esa impresionante combinación de complejidad y melodía), que hace a este grupo a algo más parecido a una mezcla sublime entre Symphony X, Shadow Gallery y sus vecinos Sonata Arctica. En recumen, coros muy melódicos y cuidados, composiciones musicales muy elaboradas y un virtuosismo que ya querrían muchas bandas de progresivo sobre la faz de la tierra.
Me gustaría resaltar el papel que realiza Tommy Karevik a las voces (todo un descubrimiento para mí), donde nos regala un excelente trabajo vocal, moviéndose sin problemas entre distintos rangos vocales que nos recordarán, sin duda, a los de Tony Kakko y el mismísimo Russell Allen (lo cual ya es decir mucho). Pero no sólo de voz vive este grupo. El trabajo de guitarra es excelente, especialmente en los solos, donde se muestra una versatilidad increíble; los teclados se notan y sobresalen también en todo el trabajo y la base rítmica es muy buena, sobretodo a nivel de batería. De hecho, indagando en Internet he descubierto que instrumentalmente se han labrado una más que merecida fama en el panorama internacional, gracias a las cualidades técnicas e instrumentales que poseen y a las actuaciones en directo que han realizado hasta ahora.
En cuanto a las canciones, me resulta muy difícil resaltar alguna sobre el resto. Me quedo con todas ellas, desde la inicial “Wiseman”, hasta la extensa (!!de 30 minutos de duración¡¡) pero nada aburrida “The Great Escape”, que finaliza el álbum de una forma épica. Por poner “una pega”, decir que la balada “Long Way Home”, quinto tema del álbum se me hace un poco floja, pero que no desmerece en absoluto la calidad de esta entrega musical (simplemente es que se me hace un poco “pastelera”, si me lo permitís).
Comentaros que en su perfil de “Myspace” podréis encontrar el primer video promocional en la historia de esta banda. Se trata de la magnífica “Alley Cat” (segundo tema del álbum), que alcanzó más de 35.000 escuchas en sus primeros 15 días de existencia. Lo cual da una idea bastante clara de lo que (espero y deseo) el futuro deparará a esta magnífica banda.
En resumen, si te gusta la música con cambios de tiempo y ritmo constantes acompañada de una exquisita y virtuosa elaboración musical (lo que viene siendo el metal progresivo de grupos como Symphony X, Dream Theater, Circus Maximus, etc…), entonces este es tu grupo. Los prog-metaleros apreciaran esto como el oso aprecia la miel (lo siento, no se me ha ocurrido otro simil). Si por el contrario, el Prog-metal no es tu estilo musical, puede que no lo disfrutes tanto, pero sinceramente, harías mal en no darles una oportunidad… Igual te poseen, como han hecho conmigo.
Trallazos:
1. Wiseman.
2. Alley Cat.
3. The Angelmaker.
4. King of Whitewater.
5. Long Way Home.
6. Move on Through.
7. The Great Escape.
Banda:
Andreas Blomqvist (bass)
Johan Liefvendahl (guitar)
Tommy Karevik (vocals)
Andreas Soderin (keyboards)
Johnny Sandin (drums)
Salud y Cuernos!!!!
Marciaaaaal.