A pesar del mal tiempo, de ser miércoles y sin ser víspera de festivo, unas ciento y pico personas se acercaron a la madrileña sala Sol para ver a los suecos BULLET, esta vez acompañados de los catalanes 77 que fueron los encargados de abrir la velada.
No tardamos en darnos cuenta de que lo de la puntualidad en esta sala a la hora de albergar conciertos no va con ellos, y un concierto que estaba previsto que empezara a las 22 horas se retrasó solamente otra hora más, empezando a las 23 horas a pesar de que muchos de los estábamos allí al día siguiente teníamos obligaciones laborales. Me imagino que lo harían de buen rollo, para que fuéramos entonados y con la garganta caliente ( no me jodas!).
A dicha hora (23h) empezaban los 77 con su show. Una vez más estética setentera al más puro estilo AC/DC de la época del fallecido Bon Scott como nos tienen acostumbrados a verlos en cada uno de sus conciertos, y con una energía y un buen rollo que hizo que el público conectara con ellos desde los primeros acordes.
Empezaron con “ Your game’s over” y “High Decibels” canción que da nombre a su segundo trabajo, y continuaron intercalando temas de sus dos trabajos, el mencionado High Decibels (2011) y 21st Century Rock (2009). Los dos citados temas anteriores, fueron los que les sirvieron a los de Barcelona, para calentarse y calentar a los agolpados seguidores de la sala, después de ello los hermanos Valeta se comieron literalmente el escenario con sus idas y venidas por él. Unos auténticos animales del directo.
Su concierto a pesar de abrir este, fue sin duda lo mejor de la noche. Nos dejaron momentos memorables, como la interpretación de “Promise Land”. Impresionante ópera rock sacada de su segundo trabajo High Decibels. Con este tema se encargan en dejar claro que los que les encasillen solo en los AC/DC de los 70 están muy equivocados, pues en este tema podemos denotar a través de sus innumerables cambios de ritmo, diferentes variantes del rock interpretado con muchísimo gusto y estilo. O La interpretación de la inédita o no incluida en sus dos trabajos “Things you can’t talk about”, grandísimo tema que solo aparece en un sencillo de su segundo trabajo High Decibels, como cara B.
El tiempo de los barceloneses en el escenario transcurría antes de llegar a su fin, con muchísima movilidad, muchísima fuerza y una grandísima conexión con el público. Con un gran Armand como maestro de ceremonia, y un vital LG, que se bajaba del escenario a compartir solos de guitarra con sus fieles y enloquecidos seguidores.
Para mi es grato ver de vez en cuando como un entrante algunas veces, se come a un plato principal, esto fue lo que ocurrió el pasado miércoles 6 de Abril del 2013.
Tras quedarnos afónicos como consecuencia de la pedida de bises a los catalanes, se colocaban en el escenario los suecos BULLET.
Los suecos empezaban con “Into the night”, una descarga de metal salvaje ochentero, al más puro estilo ACCEPT. Si bien el sonido en este mencionado tema y en el siguiente “Turn in up loud” no fue muy bueno, a partir de “Dusk till dawn” este mejoro hasta el final, siendo un lujazo para nuestros oídos.
Los suecos nos deleitaron durante toda su actuación con un repaso de sus seis trabajos oficiales, pero con una puntualización más aguda en su último Full Pull, trabajo en el que está centrada esta gira.
Es cierto que BULLET, no nos ofreció un concierto sobrado de movilidad y espectáculo sobre las tablas, entre otras cosas porque su vocalista Dag Hell Hofer es un tipo bajito que andara por los 130 kg de peso, y no creo que sepa el significado de la palabra deporte ni en su idioma natal. Un tipo la mar de curioso este vocalista, sus movimientos eran lo más parecidos a los de un koala, y su mirada de psicópata daba autentico terror por momentos. La poca elasticidad entre comillas, la supieron corregir con un sonido impresionante, una grandísima compenetración musical y una grandísima voz.
Espectacular la dupla guitarrista formada por Alexander Lyrbo y Hampus Klang, se compenetraron a las mil maravillas durante toda la actuación y se intercambiaron los momentos de solo canción tras canción.
El concierto finalizo antes de lo previsto, debido a que Dag Hell Hofer arrastraba problemas vocales, aun así provisto de su capa de monarca de las tinieblas, fue capaz de terminar destrozando sus cuerdas vocales cantando con el público “Bite the bullet”.
Una gran noche de rock and roll y heavy metal, empañada una vez más con la clausura de una de las mejores salas de conciertos de la capital, la sala Caracol. Esperamos y deseamos que sea por poco tiempo.
David Bender