Mala noche (y no solo por el frío reinante en la capital), la elegida por estas tres bandas para tocar en Madrid.
Entre presentaciones de dvd, coincidencia con otros conciertos y, sobre todo el derbi madrileño, el aspecto que ofrecían las inmediaciones de la sala Audiorock cuando llegamos a su puerta era más que desolador.
Ya sabíamos que la combinación de partido de fútbol de máxima rivalidad con conciertos de heavy metal no era la mejor combinación posible, pero es que lo de la noche del sábado 1 de diciembre fue demencial.
Cuando accedimos a la sala a eso de las 22.00 de la noche el aspecto que presentaba no era mucho mejor que el visto en la calle. Quitando los músicos de las bandas que actuaban no habría dentro ni 20 personas… cosa que no mejoró a lo largo de la velada.
Abrieron fuego los valencianos PROMETHEUS, que como siempre que un servidor les ha visto, salieron dispuestos a darlo todo. Sin importarles tener que tocar ante 20 personas, desde el primer momento pusieron toda la carne en el asador y nos dieron una buena ración de heavy metal.
Volvían a Madrid para presentar de nuevo su disco 1001 y una vez más dieron un buen repaso a los temas de éste. Tras la intro del álbum empezaron con “Dolor y pasión” con el que se metieron desde ya a la gente en el bolsillo. Siguieron con “Joven caos” y “Frío frente al altar”, uno de sus mejores temas. A estas alturas tanto Fernando Broseta (voz) como Jandié Serrano (guitarra) ya habían dado buena muestra de sus aptitudes encima de un escenario. Tampoco faltaron “Mil años y un día”, ¡espectacular!, que cantamos todos, “Cerveza o muerte” con su fácil estribillo” o el tributo al desaparecido DIO con “El fantasma de los sueños”, para cerrar el concierto con su versión del famoso tema “Maniac” de la película Flashdance y “Sangre en las manos” de su anterior Sangre y barro. ¡Un diez para PROMETHEUS!
Tras una breve pausa salieron a escena ÁGADON. Venidos desde Puertollano y al igual que PROMETHEUS, tomaron el escenario con todas las ganas del mundo, sin amedrentarse por el poco público que los estaba viendo para presentar su disco Los últimos días.
Ya desde su primer tema, “Jamás”, pudimos darnos cuenta que el sonido no era el más adecuado, cosa que siguió así durante toda su actuación. Siguieron con el conocido “De las cenizas” donde Domi se lució en su solo.
No faltó el toque a los políticos del país y a la situación que vivimos por su culpa con “Cadenas del Estado” y el homenaje a todos los que luchan contra enfermedades con “¿Quién soy yo?”. Siguieron repasando otros temas del disco como “Tiempos de dolor” o “Gritemos al cielo”, de los mejores de la velada, aunque ya con el ambiente bastante decaído. La cosa mejoró un poco con la versión del “Perro traidor” de SARATOGA que con “Ave fénix” fueron los dos últimos temas del show de ÁGADON, que abandonaron el escenario dejando un buen sabor de boca entre el respetable.
Para terminar la noche, quedaba la actuación de los alcalaínos KINNARA, a lo que solamente ví dos o tres temas y en los que pude comprobar las ganas tremendas que tienen estos 4 chicos y, sobre todo el empuje encima de las tablas de Roberto a la voz y Pablo al bajo. Esperaremos a otra ocasión para juzgarles en su justa medida.
pelos