Los extremeños SHERATÁN nos presentan su tercera obra. Tras los sensacionales Reencarnación (2006) y La maldición (2008) ponen en circulación Mundo sin perdón.
Se trata del primer trabajo después de consolidar la formación actual con los fundadores Sergio Rodas (guitarra y voz) y David Romero (guitarra) y los últimos fichajes Sergio Sánchez (bajo) y José Salas (batería).
De la producción se han vuelto a encargar Sergio Rodas y David Romero y de nuevo el resultado ha sido realmente espectacular, dotando al disco de un sonido brillante que, sinceramente, no creo que nadie externo a la banda hubiera logrado sacar.
El trabajo se abre con un grito de esperanza, “Generación revolución”, una llamada a la rebelión ante la caótica situación en la que se encuentra inmersa esta decadente y podrida sociedad capitalista. Es el momento de la lucha. Un cambio de ritmo en la parte central del tema nos lleva a un solo y unas guitarras dobladas realmente espectaculares. Tema perfecto para abrir el disco, que además deja claro el camino que éste va seguir.
Una brutal entrada nos lleva a “En manos del odio”, que compagina velocidad y dureza con un sensacional estribillo cargado de melodía, llevado al máximo gracias a la sensacional voz de Sergio Rodas. En este tema podemos apreciar la labor de Sergio Sánchez y José Salas marcando una demoledora base rítmica, que se hará notar en cada uno de los temas.
SHERATÁN es un grupo que siempre se ha mostrado crítico en sus letras ante la injusticia o la degradación de la sociedad. “Mundo sin perdón” es una muestra de ello. Una dura entrada con el bajo de Sergio y la batería de José marcando el tempo da paso a un tema donde la voz de Rodas se convierte en protagonista junto a la guitarra de David Romero.
“Dame una razón” es una nueva muestra de cómo SHERATÁN son capaces de aunar velocidad, dureza y melodía, todo ello aderezado con un esmeradísimo trabajo de guitarras.
Punto y aparte es el particular homenaje que han dedicado al añorado Ronnie J. Dio, “Eternamente”. Trepidante entrada para un tema cargado de sentimiento, con un Sergio Rodas bordando su interpretación y un solo de David Romero que pone los pelos de punta. Tremenda.
Tras un melódico preludio, “Resignación” se va transformando en un intenso tema marcado de nuevo por la contundencia de la base rítmica y por esa facilidad que demuestran para cambiar de ritmo en el momento adecuado.
Dureza a raudales es lo que nos trae “Jugando a matar”. Espectaculares guitarras y un estribillo marca de la casa, cargado de intensidad con Sergio Rodas dando muestras de la riqueza de su registro vocal.
Un fragmento de un antiguo tema compuesto para el primer grupo que formaron Sergio Rodas y David Romero, GEISHA, ha sido utilizado para el arranque de “Abrazo final”. Esta melódica intro da paso a un tema en el que la dureza va “in crescendo”, cargado de cambios de ritmo, para desembocar en un intenso estribillo.
La enigmática intro de “Hija de Luzbel” nos sumerge en una original pieza, cargada de una mágica ambientación que te atrapa desde la primera escucha. Las guitarras de nuevo se erigen como protagonistas en la parte central del tema.
Clásica 100% suena “Segunda Atlantis”, con una base rítmica que no da descanso, un pegadizo estribillo y sobre todo unas afiladas guitarras que son las protagonistas, sobre todo de la parte final del tema.
Para el cierre se guardan una joya como “Resurrección”. De nuevo un tema en el que logran una magnífica ambientación, con unas inquietantes voces que dotan al tema de una atmósfera envolvente.
Mundo sin perdón es sin duda un grandísimo paso adelante de una banda que disco a disco está demostrando que merece ser reconocida como una de las más grandes del metal nacional. Para ello cuentan con el baluarte de la versátil voz de Sergio Rodas, para mí la mejor del panorama actual.
Todos los temas, trabajados hasta la saciedad antes de llegar al proceso de grabación, cuentan con unas intros realmente espectaculares y unos cambios de ritmo que las enriquecen de tal manera que no permitirán en ningún momento que caigas en el aburrimiento. Imprescindible destacar el trabajo de David Romero y Sergio Rodas a las guitarras, que han llegado a un nivel de compenetración difícil de ver en otros grupos a día de hoy. Estamos ante los Smith & Murray de la península.
Pero si hay algo que ha ayudado a superar el difícil listón dejado en su anterior trabajo, La maldición, ha sido sin duda la incorporación de una demoledora base rítmica formada por esa bestia de las cuatro cuerdas que es Sergio Sánchez y esa máquina de precisión que es José Salas. Su aportación otorga al sonido de SHERATÁN una agresividad, un empaque y una contundencia encomiables.
No pierdas la oportunidad de hacerte con Mundo sin perdón. No podrás parar de escucharlo en tu reproductor. Y sobre todo no dejes pasar la oportunidad de verles en directo: te aseguro por experiencia propia que no saldrás defraudado.
Alberto Yayo.